Anoche quedamos a las 10.00 para ir a desayunar. Al pueblo de al lado. Son las 9.00 y los móviles aún tiene un cuarto de hora para empezar a sonar. Pero nosotros ya estamos despiertos. Me levanto y aligero el paso hasta llegar a la ventana. Ni buenos días ni leches!. Que anoche estuvo lloviendo y hoy queremos hacer dos excursiones chulas chulas!. Me asomo. Miro al suelo. Seco. Levanto la vista al cielo. Nubes, pero empieza a clarear.
Terminamos de vestirnos y de recoger las cosas. La maleta está ya lista. Como aún no son las 10 decidimos llevar las cosas hasta el coche. Así damos tiempo a que se levante la otra pareja. Y de paso damos un pequeño paseo por el pueblo. Aún no hay mucha gente por la calle. Está bastante tranquilo. Parece que empieza a despejar.
A menos cuarto regresamos a la casa. Seguro que la otra pareja ya estará levantada y esperándonos. Cuando llegamos, coincidimos con ellos en la puerta. Vienen también de dar un paseo por el pueblo. A las 8.30 ya se habían levantado!!. Pues solo queda recoger sus cosas y despedirnos de la propietaria. Nos vamos a desayunar a Ezcároz, que ayer cuando llegamos a Otsagabia nos pareció que tenía mucho ambiente.
En Ezcaroz aparcamos en la otra orilla del rio Salazar. Ni un alma por la calle. Dónde se ha metido toda la gente que vimos ayer?. Localizamos un hostal con una terraza. Allá nos vamos. Entramos y pedimos los desayunos. Zumos, algún cola-cao, cafés y tostadas con pan y mantequilla. Primer problema. No hay naranjas para hacer el zumo a todos. Igual no llega ni para tres. Decidimos que lo ponga en vasos más pequeños. Y cuarto zumo que sea de mandarina. Nos salimos con los desayunos a la terraza. A duras penas encontramos una mesa limpia. La mayoría aún conservan los restos de la noche. A ellos se les ha unido un nutrido grupo de moscas, que se están poniendo las botas!!. Entre manotazos al aire nos terminamos de tomar el desayuno. De reojo miramos al cielo. Aquí ya no está tan despejado….
Dejamos la terraza con sus moscas y nos vamos al coche. La guardia civil está montando un control. Parece que buscan algo a alguien. Nosotros nos vamos al coche y retrocedemos de nuevo hacia Otsagabia. Allí tomamos la carretera que nos subirá al Puerto de Larrau.
Puerto de Larrau
Enseguida comienza la subida. Es menos dura de lo que en un principio me había imaginado. Las vistas son espectaculares. Por todo el paisaje se ven repartidos rebaños de vacas o de ovejas.
Llegamos arriba. Un cartel nos indica que hemos dejado Navarra. Aparcamos y salimos a contemplar el paisaje. La niebla se va echando sobre nosotros a paso ligero. Pero tan pronto lo cubre todo como que desaparece.
Seguimos nuestra ruta. Ahora toca cuesta abajo. Hasta llegar al pueblo francés de Larrau. Allí tenemos que coger dirección Tardets y enseguida tenemos que ver los carteles que indican el camino a la Pasarela de Holtzarte.
